Exámenes de septiembre

Desde este año en adelante (hasta nueva orden o cambio de gobierno o berrinche de alguien) los exámenes de septiembre pasan al mes de julio. No me quiero imaginar como será hacer un examen el 10 de julio a las 4 de la tarde en las aulas de esta facultad. Solo por no hacerlo sería capaz de casi cualquier cosa. Menos mal que soy una de las pocas afortunadas de mi clase que llevo todo al día. Una gran satisfacción personal, la verdad. Y además no me puedo quejar de mi media. Pero luego llega la repesca, se examina a la gente y salen las notas y casi me arrepiento de haber aprobado en su día. Resulta que te mantienen la nota que saques, si sacas un 8, te quedas con el 8. Y tú que aprobaste a la primera y sacaste un 6 por que tenías otros 4 o 5 exámenes y no dabas para más, te aguantas con una media menor que los demás. ¿Justicia? Pues no, como siempre. Porque no queda reflejado que aprobaste a la primera y el otro no. Aparece que tú tienes un 6 y el otro un 8. Para colmo, te enteras que han sacado mejor nota que tú haciendo EL MISMO EXAMEN DE LA PRIMERA CONVOCATORIA. O sea, que no me extraña que la nota sea mejor. La mayoría de los profesores son tan vagos (o no sé que excusa tendrán) que no podían cambiar el examen 6 meses después. ¿Tan tontos son que no creen que los alumnos hayamos memorizado las preguntas para el próximo? ¿O es que quieren que aprobemos muchos para ahorrarse trabajo el curso que viene? Otro misterio de la vida universitaria. Menos mal que yo no soy rencorosa y soy feliz con la nota que he sacado porque me la merezco y la conseguí a la primera.

Más sobre exámenes aquí, aquí.