Cookies

sábado, 15 de diciembre de 2012

Egos y falta de educación

Cuando un profesor llega todos los días a clase "como" enfadado (que a lo mejor es que es así por naturaleza, quién sabe), "como" frustrado, pagando con nosotros algo que dios sabe de donde lo trae y encima nos trata como tontas e incultas... no encuentro ni la palabra para calificarlo. El profesor en cuestión tiene una carrera de letras específica (no doy más pistas para que no se me escape el nombre) y da la sensación que le han metido a enseñar ciencias sociales para educación infantil por obligación o porque estaba en el paro y no tenía otra cosa que hacer por mucho doctorado y titulitis que tenga. El caso es que la asignatura se nos está haciendo pesada, tediosa, no sabemos por donde cogerla, sabemos que lo pagaremos caro en los exámenes de febrero y no podemos evitar pensar (al menos yo) que estamos perdiendo el tiempo, que no nos sirve de nada lo que nos dice, que no tiene ni pies ni cabeza y que es otra más a la lista negra de esta carrera.
El curso empezó con profesor asignado que se fue por motivos personales antes de empezar las clases. Después de varias semanas llegó su sustituto que resultó ser sustituta y estar preñada. Total, dio dos clases y se dio de baja. Dos semanas después se presentó éste como el "definitivo" hasta los exámenes de febrero pero nos está haciendo desear que se dé de baja y perdamos el dinero invertido porque es increíble lo que nos está haciendo. Se pega las horas muertas hablando de su vida privada, dándonos consejos gratuitos (por los que se supone que le debemos de estar enormemente agradecidos) de cosas que no nos interesan o Dios sabe si llegarán algún día o no (como las oposiciones), nos critica los e-mail que le mandamos y las malas formas de ciertas cosas (en esto tiene algo de razón, la verdad) pero en plan... mal, como para molestar más que para educar y hasta nos ha dicho cómo debemos ir vestidos a unas oposiciones para no dar mala imagen y, al menos, aprobarla (no lo da por hecho, claro).
Hemos intentado hablar con él pero no hemos conseguido llegarle. Al contrario, se ha sorprendido de la "actitud" de la clase porque nunca se ha encontrado nada parecido. Madre mía. Ni que tuviera 60 años.

La última semana lo que hicimos en el seminario fue escribir el título del trabajo que tenemos que hacer y ya. No dio tiempo de más. Y en otra, nos puso este video:



Que será de Disney y todo lo que queráis, pero aún no sabemos a cuento de qué viene y a mi, personalmente, me dio bastante yuyu el video y no le presté mucha atención. ¿Apropiado para educación infantil? Ahí queda.
Este se puede juntar con el de los tecnicismos porque creo que tienen el mismo ego.
¡qué difícil es aprender!



1 comentario:

  1. Al fin conseguimos hablar con él claramente y, la verdad, la última clase fue otra cosa totalmente distinta. Se disculpó por su actitud y reconoció que quizás se equivocara de táctica. Pues sí, se equivocó. Ahora mucho mejor. Lástima que nos queden 4 clases.

    ResponderEliminar